Sunday, December 11, 2016

CICLO “MAESTROS DEL CINE POLACO” (dic. 2016)

CICLO “MAESTROS DEL CINE POLACO” 

Los martes de diciembre a las 7:30 p.m. con ingreso libre



El Cineclub Ojos Abiertos del Centro Cultural de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP) y la Asociación Peruana de Prensa Cinematográfica (APRECI) presentan este mes un ciclo dedicado a grandes realizadores polacos, como son Andrzej Wajda, Andrzej Zulawski y Krzysztof Kieslowski, que incluye algunas de sus películas más representativas.
La muestra la integran “Cenizas y diamantes”, obra maestra de Andrzej Wajda que marcó la renovación del cine polaco y europeo de fines de los años 50; “Lo importante es amar”, sobrecogedor melodrama de Andrzej Zulawski protagonizado por la actriz Romy Schneider; y “No matarás”, una de las cumbres de la filmografía de Kieslowski, extraída de su serie Decálogo inspirada en los Diez Mandamientos, y ganadora del Premio del Jurado del Festival de Cannes.
Las funciones serán los días martes 6, 13 y 20 de diciembre a las 7:30 p.m. en el Auditorio Elisa Toullier de Valcárcel, pabellón F, tercer piso de la UTP, Av. Petit Thouars 116, y serán presentadas por el periodista Rodrigo Portales. El ingreso es libre.

PROGRAMACIÓN
Martes 6, 7:30 p.m.: Cenizas y diamantes (Polonia, 1958) de Andrzej Wajda. Con Zbigniew Cybulski, Ewa Krzyzanowska, Adam Pawlikowski. En Polonia, tras la II Guerra Mundial, la situación política y social es caótica y proliferan la anarquía y el extremismo. Un joven que milita en un grupo ultranacionalista recibe el encargo de asesinar a un líder comunista local, pero cuando encuentra el amor sus certezas comienzan a convertirse en dudas.
Martes 13, 7:30 p.m.: Lo importante es amar (Francia/Italia/Alemania, 1975) de Andrzej Zulawski. Con Romy Schneider, Fabio Testi, Jacques Dutronc. Servais Mont es un fotógrafo freelance que trabaja para algunos gánsteres sacando fotos comprometedoras. Un día conoce a Nadine Chevalier, una actriz casada que se gana la vida actuando en películas cutres de bajo presupuesto y se desatan las pasiones entre los dos.
Martes 20, 7:30 p.m.: No matarás (Polonia, 1988) de Krzysztof Kieslowski. Con Miroslaw Baka, Krzystof Globisz, Jan Tesarz. Varsovia es escenario del brutal asesinato de un taxista a manos de un joven campesino, cuya defensa es asumida por un estudiante de derecho ante los tribunales. "No matarás" no se centra en la culpabilidad del asesino, sino en hacernos preguntar si alguien tiene el derecho de quitarnos la vida o de decidir sobre nuestro destino.



“El cine en las entrañas. Páginas de Hablemos de Cine”



El lunes 12 de diciembre se llevará a cabo el conversatorio sobre el nuevo libro de Isaac León Frías “El cine en las entrañas. Páginas de Hablemos de Cine”  (Lima, Argos Productos Editoriales).
León Frías fue director de la revista “Hablemos de cine”  (1965 y 1984), pionera en el campo de la cultura cinematográfica peruana. 
En el conversatorio el autor dialogará con la escritora Giovanna Pollarolo y el arquitecto Reynaldo Ledgard. La cita es en la Sala Azul del Centro Cultural de la PUCP el lunes 12 de diciembre a las 8:00 de la noche.









Saturday, November 05, 2016

“Ernesto & Hildegard” - cine alemán


Estreno en el Perú de la película “Ernestoy Hildegard”, de Christina Fröhlich y Olga RichterMartes 8 de noviembre 2016 a las 19:30 horas 
Auditorio del Goetehe Institut
Jr. Nazca 722, Jesús María

Deutsch-peruanische liebe in zeiten des nationalsozialismus (amor peruano-alemán en tiempos del nacionalsocialismo)





Saturday, October 22, 2016

La primera mujer cineasta en el Perú

CINE FORUM BNP – OCTUBRE 2016
Martes 25 de octubre, 7:30 p.m. 


RESPONSO PARA UN ABRAZO (2013)
Documentales con un trasfondo sociológico muy significativo
La primera mujer cineasta en el Perú en la 
Biblioteca Nacional



La cultura afroperuana, el olvido de Elena Izcue, una revolución moral en la época de los noventas y la vida del gran poeta César Calvo, son los temas presentes en las producciones programadas por la Biblioteca Nacional del Perú en su ciclo de retrospectiva de la obra cinematográfica de la destacada realizadora Nora de Izcue.
Recientemente, Nora de Izcue fue homenajeada en el 20° Festival de Cine de Lima y actualmente es miembro de la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano y de su Consejo Superior.

El cine fórum cerrará con broche de oro, el martes 25 de octubre, a las 7:30 p.m. con la película “Responso para un abrazo” (2013), última producción documental de Nora de Izcue que narra la vida del poeta peruano César Calvo.




Teatro Mario Vargas Llosa de la Biblioteca Nacional del Perú, Av. de la Poesía 160 San Borja. El ingreso es libre pero está sujeto a la capacidad del recinto.

San Borja, 29 de Setiembre de 2016
Oficina de Imagen Institucional y Extensión Cultural
Biblioteca Nacional del Perú 

Friday, June 24, 2016

“PICNIC” DE FERNANDO ARRABAL



“PICNIC” DE FERNANDO ARRABAL: 
SARCASMO Y AUTORITARISMO

Por Armando Arteaga

En el Noveno Festival de Teatro Aficionado, en la Asociación Peruano-Japonesa, destacó la puesta en escena de la obra “Picnic” de Fernando Arrabal realizada por la Compañía de Teatro & Danza bajo la dirección de Lorenzo Rico, pequeña pieza de 30 minutos, que es un alegato contra  la guerra, esa actividad bélica que envuelve la vida de los hombres y que destruye la convivencia humana del mundo actual, por lo menos, es una “crítica’’ a mediados del siglo veinte, con ribetes cómicos, a los  que nos tienes destacado del ‘’postismo’’ español, tomando como herramientas todos los instrumentos del teatro del absurdo y  la crueldad exhibicionista, llena de sarcasmo y despiadada crítica social al autoritarismo y el totalitarismo. 

 Arrabal
 
Picnic en el campo de batalla es una obra escrita por Fernando Arrabal en 1947 y estrenada en 1952, donde se evidencia lo absurdo y cruel de la guerra, de cualquier guerra. Un matrimonio de ancianos decide ir a la guerra a visitar a su hijo, un soldado, y  ofrecerle un suculento día de campo en el frente de batalla. Compartirá con un soldado enemigo, éste picnic de manera amistosa y empezarán a  comentar las  vivencias nefastas en la guerra, llegando a la conclusión que ninguno de ellos quiere seguir estas experiencias bélicas, determinando lo absurdo del conflicto, buscando la manera de regresar a casa y terminar con estas acciones, en donde perecen en el dilema del “teatro de operaciones” de esta guerra.
La puesta en escena de Lorenzo Ricco es fiel al texto dramático de Arrabal, se mantiene la estructura narrativa dentro de la visión que le impone el manifiesto más surrealista de Arrabal (Zapo: Soldado, Hijo del matrimonio Tepán. Zepo: Soldado enemigo. Señor Tepán: Padre de Zapo. Señora Tepán: Madre de Zapo. Dos Camilleros). Mantiene los diálogos delirantes, la absurdidad de lo cotidiano, la la ironía experimental, la inventiva verbal y el predominio de lo subjetivo.  La guerra es un suceso absurdo aun observados por estos personajes ingenuos e inocentes. 

 El libro de Arrabal

El disfrute del “picnic” en el escenario mismo de la guerra ha sido logrado por un buen manejo de la iluminación que apoya la acción y la especulación narrativa de la obra.  Ricco ha cuidado bien este factor que ayuda a subraya sus  propias hipótesis acerca de la guerra consiguiéndolo con un trabajo verosímil de sus actores, que aunque son aficionados, se esfuerzan por lograr realismo y postura acertada en el lirismo cruel de la imaginación de Arrabal.   Acertada la iluminación de la escena final planeada por el director Ricco. Suena la música, bailan y, de tan alegres, no se dan cuenta de que se han reanudado los combates y «una ráfaga de ametralladora los aniquila a los cuatro». Entran los camilleros y baja el telón.
Ha sido un acierto poner nuevamente al público juvenil este pieza  teatral “Picnic” de Arrabal, aunque hubiese sido bueno también recordar otras obras  como “Cementerio de automóviles” o  “El arquitecto y el Emperador de Asiria”, pues creo que Ricco está preparado para riesgos más difíciles.  Nos ha gustado la realidad escénica del espectáculo y la impronta dramática-literaria de Arrabal, que hasta nos parecía haberla olvidado.  Pero no, está viva, y presente.  

 Arrabal en la modernidad liquida

Saturday, June 04, 2016

LA ESCENOGRAFIA TEATRAL COMO UNA EXPERIENCIA ICÁSTICA

ENTREVISTA A ARMANDO ARTEAGA:

LA ESCENOGRAFÍA TEATRAL  COMO UNA EXPERIENCIA ICÁSTICA (1)

Por Nuria Gómez de la Torre*






Gómez de la Torre: ¿Cómo empezó en usted este tema de la escenografía teatral?

Arteaga: Empezó como una tarea complementaria al desarrollo de mis estudios de arquitectura, y más tarde se hizo algo vital en el trabajo practico de la arquitectura. Resulta que un día de esos tiempos inquietos, posiblemente el año 72,  Hugo Salazar del Alcázar (amigo, poeta, que estudiaba arquitectura como yo) me pidió que hiciera una conferencia para sus alumnos y compañeros de un taller de arquitectura de la Universidad Ricardo Palma.  Para suerte nuestra, en ese taller había un grupo muy interesado en los temas del teatro, del espacio teatral.  Habían estudiado muy bien los aportes de La Bauhaus, y ya estaban  
leyendo a Brecht  y a Piscator.  Me pidieron discutir la relación entre teatro y política, pero desde la visión académica de la iconografía escenográfica y desde nuestra perspectiva de estudiantes de arquitectura. Ellos tenían en ese momento como referente bibliográfico el libro “Investigaciones sobre el espacio escénico” de Juan Hormigón.



“Lazarus Laughed” de O´Neill/ Boceto de Armando Arteaga


Todos allí éramos estudiantes de arquitectura de la UNI, de la Ricardo Palma, de la UNSA… pero también habíamos pasado por la experiencia de lo teatral.

Yo había estudiado en el Club de Teatro de Lima (cuando quedaba en el sótano del cine Le Paris, en la Colmena) con Reynaldo D´Amore, un maestro de primera, director y actor argentino venido desde la experiencia de los tiempos teatrales de Sebastián Salazar Bondy, de la apertura de la agrupación  Espacio, y del social progresismo. Había puesto obras importantes con el Teatro Hebraica, además era un seguidor y divulgador de las ideas de Stanivlaski. Toda esa experiencia mía fuera de la universidad, se complementaba con mi otra experiencia en la FAUA del TUNI, “algo brechtiana”, debida al “distanciamiento brechtiano” que enseñaba  Atahualpa del Cioppo.  Por mi participación estudiantil, de asistencia teatral, con  el maestro uruguayo, que era un vanguardista nato, había puesto en escena en una carpa de circo en la Concha Acústica del Campo de Marte, "Ubú Rey", la obra de Alfred Jarry.

Gómez de la Torre: ¿Entonces su experiencia viene del teatro universitario?

Arteaga: Se podría decir que sí. Aunque yo ya tenia otras inquietudes;  en ese momento andaba más interesado por el cine, pero Hugo Salazar del Alcázar, que era muy amigo mío, un joven muy inteligente y de una cultura amplísima, me convenció de seguir juntándonos para hablar de “espacio teatral”.  Tuvimos  muchas reuniones de café y tertulias literarias donde siempre estaba presente nuestro interés por el espacio escénico; así que, siempre que podíamos nos juntábamos para retomar este tema de la problemática de la escenografía teatral, aunque lo cierto fue que terminamos haciendo revistas de arquitectura y de literatura





“Los Ruperto” de Juan Rivera Saavedra/ Boceto de Armando Arteaga

También recuerdo esos tiempos con Wiley Ludeña, otro amigo importante de aquellas hazañas de estudiantes. El grupo de Hugo y Wiley,  donde también solía activar y aparecer ciertas tardes Percy Valencia (con Eduardo de Piérola hicieron la escenografía de “Cuanto cuesta el hierro”, una obra de Brecht, que dirigió Arturo Nolte, con el TUNI), tenía una experiencia muy amplia.  Habían participado en un encuentro teatral con campesinos en Andahuaylas, así que ellos dominaban el tema del teatro como un problema didáctico.






“La Orestia” de Esquilo/ boceto de Armando Arteaga


Gómez de la Torre: La tendencia viene entonces específicamente de un grupo de estudiantes de arquitectura que estaban interesados por los problemas del “espacio teatral”, en un momento de conflictos sociales en el país.

Arteaga: Claro, era algo demasiado académico, pero todos teníamos practica política, por nuestra cultura, éramos inquietos porque creíamos que la arquitectura era una ciencia social, o una técnica (de carácter social).  De eso habla en su libro "Arquitectura para una ciudad fragmentada", Elio Martucelli,  quien ha dedicado unas páginas a la revista Tramma, que era de asuntos de arquitectura y urbanismo.  Hugo y yo estábamos interesados en temas más específicos como el teatro y el cine,  por lo que ambos terminamos haciendo critica teatral y critica de cine en periódicos y revistas.  Teníamos  capacidad para lo del espacio teatral, éramos geómetras, manejábamos el dibujo y la perspectiva, el diseño, la geometría descriptiva... pero nos faltaba tiempo para ponernos a hacer cosas especificas, éramos dispersos también, pero en fin, de allí  viene esa parte dedicada por nosotros al interés por el teatro, y la escenografía teatral.

Gómez de la Torre: Y resultó estudiando en el Seminario de Saulo Benavente nada menos…

Arteaga: Fue algo de juego lúdico,  del destino.  Un día se aparece Hugo Salazar del Alcázar muy agitado, por los pasadizos de la Facultad y me dice "mañana tenemos una reunión con Silmel Siqueira en El Haití de Miraflores"...  iba a poner en escena “Muerte y Vida Severina”  de Joao Cabral de Melo Neto.  Resulta que Pablo Fernández le había hablado de nosotros dos para ayudarle a armar la  escenografía y las luces para su obra. Pablo Fernández estaba agradecido de la ayuda que le habíamos dado para realizar su escenografía de “Raíces” (de Wesker) en la AAA.  De allí, del Haití, nos fuimos a tomar unos vinos a la casa de Hugo Salazar del Alcazar.  La verdad que Silmel era un personaje que hablaba con una pasión increíble sobre la escenografía,  entonces  nos unimos a Marco Leclere para hacer unas maquetas.  La cosa resultó más fácil a partir de esa experiencia. 

Años más tarde Norberto Testa, un amigo argentino,   me contactó con Saulo Benavente para ir a su "Seminario de Escenografía" en la Universidad de Costa Rica, en 1981.  Fue así que empecé a tomar el tema de la escenografía como algo serio, resultando ser en lo personal,  algo contradictorio entre arquitectura y teatro. Saulo ya era una leyenda de la escenografía argentina, y yo (había hecho un curso de dramaturgia con Vicente Leñero en la Universidad Autónoma de Puebla), ya escribía crítica de cine. La experiencia me resultó un paso importante, no necesariamente un paso más en la vida. 

Después de ese encuentro del Seminario con Saulo Benavente, la cosa fue diferente, me di cuenta que podía hacer algo mayor a pesar de que los grupos teatrales peruanos le corrían al tema del espacio escénico.  Estaban muy imbuidos en el “teatro laboratorio” de Grotowsky, y eso impedía un dialogo sobre espacio teatral.  Yo tiré una patada al tablero, me aislé (con respecto a la actividad teatral limeña), me dediqué más a la critica cinematográfica, lo que al final fue una actividad solitaria, tomada de vez en cuando. 

Muchas veces le mostré mis bocetos a Hugo, y en él había entusiasmo,  hasta hablamos de hacer una exposición colectiva, pero eso no se realizó nunca. Aunque, después,  con ITI-UNESCO de Eduardo Navarro,  me puse a enseñar, a dar lecciones de escenografía teatral.  Pero pronto vino el apagón cultural de Sendero y la dictadura de Fujimori, y todo se opacó de nuevo, en blanco y negro: quedó como algo inconcluso esa falta de color, de iluminación para el teatro peruano. Era imposible hablar de arquitectura de “instalaciones  efímeras” en ese momento, cuando mi entusiasmo volvía  a poner los ojos en el teatro, para hacer escenografía con más profesionalismo.  Aunque siempre he realizado esporádicamente, trabajos para algunos amigos y productoras.




”Amor, Gran Laberinto” de Sebastián Salazar Bondy/Detalle de boceto de Armando Arteaga

Gómez de la Torre: ¿De qué tendencias del mundo académico se siente Ud. más cercano?

Arteaga: No creas que todo era así tan político y social, también nos gustaba la parte formal, tomábamos con mucha admiración “Los fundamentos del diseño” de Robert Guillam Scott.  Para nosotros el diseño era lo más importante.  Antes que lo que te pueda dar la realidad, todo se  transformaba a través del diseño, esa era nuestra herramienta, por eso, en lo que hemos visto en bocetos, en maquetas, en fotografías, y en “mise in scene” de obras teatrales,  en el caso peruano, donde se dan muchas limitaciones para explicar el proceso histórico de la escenografía (no existen casi archivos),  me gustan los aportes de Santiago Ontañón, Alberto Terry,  Santiago Escomel, Remberto Latorre, Marco Leclere, Ricardo Greco, Marcelo Damonte, E.Baananate, Virgilio Velásquez, Luis La Roca, Alberto Yauri, Pablo Fernández, Carlos Padilla, Jorge Guerra, Jorge Málaga, Pepe Corzo, Milagros Ponce de León, Mario Ráez, y Carlos Mesta.  Tal vez estoy olvidando algunos nombres. Algunos pintores que se han acercado a la escenografía teatral son José Sabogal, Víctor Delfín, Carlos Aitor Castillo, y Francisco Izquierdo López, Julio Camino Sánchez, mi profesor del colegio. También recuerdo al arquitecto Victor Pimentel y a Carlos Bernasconi, mis profesores en la Facultad de Arquitectura, al maestro pintor Manuel Ugarte Eléspuru.  Siempre que puedo vuelvo al tema del diseño escenográfico.   Este año hice un curso de iluminación con el profesor argentino  Facundo Estol en la PUCP, fue muy interesante volver a tomar café con jóvenes que estudian escenografía, aunque las cosas han cambiada mucho.  Hoy con los aportes de la tecnología, hay más tiempo para la especulación y para obtener mejores resultados en cualquier proyecto. 




     




(1) Armando Arteaga,  es arquitecto, periodista y escritor.

ESTUDIOS

Realizó estudios  de Arquitectura, Urbanismo y Artes en la Universidad Nacional de Ingeniería-Lima (UNI).  Participó en el Teatro Universitario de la UNI (TUNI) como ayudante de director de escena con Atahualpa del Cioppo; y como diseñador de bocetos y maquetas con Marco Leclere en el Teatro de la Universidad Católica  (TUC-PUCP).   Estudió en el Club de Teatro de Lima  con Reynaldo D´Amore, y con el Grupo “Histrión” con Sergio Arrau.  Estudió cinematografía con Armando Robles Godoy. Estudió en el Taller de Dibujo de Cristina Gálvez.  Estudió literatura dramática con el maestro Vicente Leñero (Universidad Autónoma de Puebla-México).  Estudió escenografía y tramoya teatral en ENSAD (Escuela Nacional Superior de Arte Dramático) con el profesor Remberto La Torre.

TRABAJOS

Trabajó como voluntario bibliotecario e investigador revisando el archivo del profesor  Guillermo Ugarte Chamorro en el TUSM (Teatro Universitario de San Marcos).  Profesor de maquetas, diseño grafico, luminotecnia y acústica,  y de planificación regional,  en la FAUA-UNI-IDESUNI (Universidad Nacional de Ingeniería). Ha participado en la puesta en escena de diversas obras teatrales, y en la dirección de cortometrajes y documentales.  Ha dictado cursos, conferencias y recitales en diversas universidades e instituciones culturales.  Ha publicado libros y  artículos literarios en diversos periódicos del país y el extranjero, lo mismo que en  múltiples blogs en varios idiomas. Ha sido profesor de “Escenografía Teatral”  en Instituto Internacional de Teatro (ITI-UNESCO),  y profesor visitante del curso  “Espacio Escénico” en la Universidad Antenor Orrego (Trujillo),  en la Universidad Nacional del Centro (Huancayo), y en la Universidad de Palermo (Buenos Aires-Argentina).  Ha participado invitado como critico de cine y teatro en varios festivales de cine y teatro  (nacionales e internacionales).   Es editor de la revista Cine indígena Cuaderno de Temas Audio-Visuales. 

PUESTA EN ESCENA DE OBRAS

Ha realizado bocetos, maquetas, planos, asesoría en decoraciones y realizaciones  pictóricas en obras teatrales, entre otras:            

1976 El Fantoche Lusitano
1980 Antígona
1982 La Celestina
1994 La vida es sueño
2001 Casa de muñecas
2004 Woyzeck
2010 La casa de Bernarda Alba




“Esa luna que empieza” de  Percy Gibson Parra/ Boceto Armando Arteaga


*Periodista y escenografa chilena que vive actualmente en Londres. Revista Theatre Bear Down.